¿Qué ocurre cuando una pérdida ha sido tan significativa que marca un antes y un después en nuestras vidas?
El duelo, en términos psicológicos, es el proceso natural que sigue a la pérdida de un ser querido o ante la inminencia de nuestra propia muerte. Un proceso similar también se da para algunas personas cuando perdemos un elemento igualmente esencial en nuestras vidas, tal como puede ser nuestro proyecto vital (separación, infertilidad…) o nuestro sentido de identidad (jubilación, migración…).
Este proceso es una reacción adaptativa natural y esperable, por lo que en ningún caso es deseable considerarlo una enfermedad, pero su magnitud puede llegar a afectarnos de tal manera que necesitemos el acompañamiento profesional.
La enorme brecha que sufrimos en nuestra vida cuando dichas pérdidas ocurren, da lugar a que parezca que el tiempo se ha detenido y el trabajo terapéutico necesita dirigirse a apoyar la restauración de esa línea del tiempo vital, tal como propone Carmen Vázquez Bandín, en la que tengan espacio tanto nuestra pérdida como nuestra vida incluyendo y partiendo de la misma.
Para lograr esto la persona necesita ser acompañada a través de los distintos estados del proceso de duelo, descritos por la Dra. Elisabeth Kübler-Ross y ampliadas por su colega David Kessler, fundador de grief.com. Estos estados son negación o shock, ira (incl. culpa), negociación (incl. ansiedad), depresión y aceptación; no siendo este último equivalente a una vuelta al estado previo a la pérdida sino una primera integración de lo ocurrido.
Para que este proceso se dé, estos estados se experimentan no linealmente sino, a menudo, en forma de ciclos que han de irse repitiendo para alcanzar una mayor asimilación de la nueva situación.
Este acompañamiento depende de cada persona y a menudo resulta de gran apoyo la terapia de grupo, en especial porque no hay un tiempo fijo en el que un proceso de duelo se “resuelve”. El dolor por la pérdida nos seguirá acompañando en nuestras vidas, pero el sufrimiento podremos superarlo y es posible que hasta podamos encontrar el valor y el significado que esta pérdida ha dejado en nuestras vidas, tal como ocurre con el crecimiento postraumático.
Si tu dolor está directa o indirectamente ligado a las pérdidas que como expat hemos de afrontar cuando dejamos nuestro hogar e identidad cultural atrás, considera el tratamiento para duelo migratorio. Encontrarás un calendario exclusivo para planear un primer contacto informativo siguiendo el enlace en esta página.
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